domingo, 11 de octubre de 2009

El sentido de mi canción

Para ti, esta bella canción
Para tus ojos, esta imagen de furor,
Para tu boca, esta pasión sin sabor,
Para tus oídos, este declive disonante,
Para tus manos, este sentido palpable.

Por ti fue esta bella canción,
Cuantos me miraron lloraron de lástima,
Nadie me aclamó por fea que sonó,
Mi canción y su armonía poco cándida,
Fuertes hacia mí fueron los ¡Oh, Dios!

Me bajaron del telón, como el polvo pesado,
Cuantos se burlaban, me abucheaban,
Cuantos me decían ¡Pobre novato!
Y me erguí sin saber cómo me trataban,
Cayendo al filo de tus pies reprobados.

Levantaste mi ser, mi cuerpo arrogante,
Sucio por dentro, humillado hasta el orto,
Y me sonreíste, con ese bello semblante.
Entonces las quejas me importaron poco
Y me fui a recibir tus brazos radiantes.

De ti surgió esta bella canción,
De ti salió esa pasión sin sentido,
De ti saqué esta pobre creación,
De ti mi alegría fue como el hilo,
De ti logré mi impulso de acción.


No hay comentarios:

Publicar un comentario